Su novia le dijo que hiciera paro y Ayan no lo dudó. Por el amor que le tiene pues que se viste como ella y suplantó su identidad; sin embargo a la hora del examen, los aplicadores comprobaron que la carita de la credencial no era igual y que se la dejan caer. A pesar de que Ayan se puso peluca negra, maquillaje, falta y una blusita, fue cachado y multado con la módica, muy módica cantidad de 33 mil pesos mexicanos.
La novia, por su parte, sigue de burra y tendrá que esperarse un año para volver a presentar el examen. Ojalá no le pida paro a otro novio.
Lo que uno hace por amor.
0 comentarios:
Publicar un comentario